La seguridad alimentaria en los procesos productivos es una prioridad de los consumidores, fabricantes y distribuidores de alimentos. El estricto y adecuado control de la cadena de producción en las etapas de (recepción, procesamiento, empaque y distribución) ha alcanzado gran auge permitiendo garantizar que los productos alimentarios cuenten con excelentes características de calidad e inocuidad.

Hoy en día, en el mundo empresarial, organizaciones y clientes exigen a sus proveedores diferentes políticas, garantías y certificados de calidad de sus procesos. Es por todo ello que en los últimos años se han ido desarrollando normas y guías para garantizar la seguridad y conformidad de los productos alimenticios, como por ejemplo BPM (Buenas Prácticas de Manufactura), HACCP (Análisis de peligros y puntos críticos de control), ISO 22000 (Sistemas de gestión de la inocuidad de los alimentos. Requisitos para cualquier organización en la cadena alimentaria).

La implementación de un sistema de seguridad alimentaria abarca BPM y HACCP permitiendo así contar con un sistema de gestión integral y completo, por ello, ISO 22000 en su más reciente versión 2018, combina los elementos básicos de las normas de calidad y análisis de puntos críticos de control (HACCP), definiendo así, los estándares de buenas prácticas y emergencia alimentaria.

ISO 22000 es la primera y por ahora la única norma internacional creada con el propósito de cumplir con los estándares y controles a implementar en los Sistemas de Gestión de Inocuidad Alimentaria. Se aplica a todos los agentes que entren en contacto con los alimentos: agricultores, ganaderos, productores de materias primas, fabricantes de productos alimenticios y aditivos, proveedores de envases y embalajes, empresas de distribución y finalmente empresas de servicios complementarios.

La norma Internacional ISO 22000, tiene como objetivo:

  • Asegurar que los alimentos sean seguros hasta el consumidor final
  • Armonizar los requisitos de inocuidad dependiendo de las exigencias de cada país (Resoluciones, Decretos)
  • Garantizar que el producto cumple y responde a los requisitos establecidos por los clientes y otras normas

Prevención de riesgos

El Sistema de Gestión de Inocuidad Alimentaria versión 2018, se enfoca principalmente al aseguramiento de la protección del consumidor y al fortalecimiento de su confianza, para ello establece los siguientes elementos clave:

  • Enfoque en la gestión del riesgo. Orientado a la minimización de los mismos en toda la cadena alimentaria
  • Análisis de riesgos. Mediante la implementación del sistema de análisis de peligros y puntos críticos de control (HACCP)
  • Metodología con ciclo PHVA. Dentro de la misma se aplican los principios de la norma ISO 9001 y otros específicos del sistema HACCP.
  • Refuerza los elementos clave. Tales como la responsabilidad de la dirección, comunicación en toda la cadena alimentaria y programas prerrequisitos

Dentro de sus mayores beneficios se encuentran: Rendimiento de los costos, el aseguramiento de la protección al consumidor, el fomento de una cultura de mejora continua y el cumplimiento de la legislación basado en el Codex Alimentarius

Con la creciente demanda por parte de los consumidores en buscar alimentos seguros y el auge de la industria por el cumplimiento de los estándares de calidad es muy importante que se implemente un Sistema de Inocuidad Alimentaria dentro de las empresas, no basta con los principios básicos de buenas prácticas, por ello, es importante que se articule la inocuidad de alimentos junto con la calidad de procesos y el monitoreo de puntos críticos de control.

Es probable que los conceptos de seguridad alimentaria sean nuevos para usted, pero permítase desarrollar un sistema de gestión amplio y completo que le ayudará a asegurar la inocuidad de sus productos y le permitirá ser más competente frente al mercado.

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